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O que significa “De Oceano a Oceano”?

Entrevista com o Dr. Thomas Ward

 

Entrevista da CF News com o Dr. Thomas Ward, membro do Comitê Executivo Internacional “De Oceano a Oceano”:

CF NEWS: O que significa “De Oceano a Oceano”?

Dr. WARD: Significa um ato de entrega da civilização do Amor e da Vida na mãos da Mãe de Deus.

CFN: Mas porquê o nome “de Oceano a Oceano”?

TW: Trata-se de uma peregrinação de um Ícone da Santíssima Virgem partindo do Oceano Pacífico, em Vladivostok até ao Oceano Atlântico, em Fátima.

CFN: Porquê este ato de entrega à Mãe de Deus?

TW: Porque o ataque global à vida, ao casamento enquanto união entre homem e mulher e à família é massivo e sem precedente histórico. Sabemos que sozinhos não conseguiremos vencer a cultura da morte.

CFN: O que é único nesta peregrinação?

TW: Após mil anos de desconfiança fratricida, Nossa Senhora une os seus filhos e as suas filhas, Ortodoxos e Católicos para juntos trabalharem de forma a trazerem ao terceiro milénio cristão, uma nova civilização do amor, assente na família.

CFN: Porquê a escolha do Ícone de Nossa Senhora de Czestochowa?

TW: Porque é a tradição mais conhecida e unificadora no Leste e no Oeste e porque na Rússia, Nossa Senhora de Czestochowa, é a padroeira daqueles que desejam a restauração dos valores da família. É uma das relíquias mais sagradas do Cristianismo.

CFN: Qual é a história do Ícone de Czestochowa?

TW: A história documentada mostra que Wladyslaw, príncipe de Opole, ofereceu o Ícone a Jasna Gora em 1382, após o ter recebido como um presente de casamento em Belz, Rus.

Existem provas de que o Ícone esteve em Constantinopla. Antes disso, teremos de nos deixar guiar pela tradição cristã que diz que o Ícone foi escrito por São Lucas. Data do tempo antes da separação entre a Igreja do Oeste e do Leste e por isso, este Ícone de Nossa Senhora pertence a ambos, Ortodoxos do Leste e Católicos do Ocidente.  

CFN: O Ícone de Czestochowa é venerado pelos Ortodoxos?

TW: A Igreja Ortodoxa venera o Ícone como um dos mais antigos da assim chamada escola de São Lucas e considera-o um Ícone Ortodoxo. Cópias do mesmo encontram-se frequentemente nas igrejas ortodoxas. Pode ser também encontrado nas casas Ortodoxas. O nome Ortodoxo para o Ícone é ‘Vitória Invencível’. O hino ‘Rainha Vitoriosa’ é cantado em honra dela. Nossa Senhora de Czestochowa é a padroeira daqueles que desejam a restauração dos valores da nação e da família.

CFN: Fale-me sobre o apoio da Igreja Russa Ortodoxa à iniciativa “De Oceano a Oceano”

TW: Em resposta à nossa peregrinação, o Metropolitano Hilarion, Presidente do Departamento para Relações Eclesiásticas Externas do Patriarcado de Moscovo, observou que no mundo contemporâneo, as pessoas tentam alcançar prosperidade material e a família e as crianças são frequentemente vistas como um obstáculo à realização pessoal. Espera que o nosso projeto, que ele abençoou, contribua para a proteção da vida e o reforço dos valores da família.

CFN: E os Polonês?

TW: Penso simplesmente que o Ícone de Czestochowa é o coração da Polónia e que foi Ela quem salvou o Leste do Comunismo ateu. Em poucas palavras - Maryja Królowa Polski Maria, Rainha da Polónia.

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Historia (em espanhol)

Por el Padre Peter West

Nuestro Señor compara el Reino de Dios con una semilla de mostaza que crece como un gran arbusto (Marcos 4, 30-3-32). Este es un recordatorio de que a veces las grandes empresas tienen un comienzo pequeño. En este momento, un pequeño grupo de misioneros pro-vida está en peregrinación a través de Rusia. Desde una perspectiva mundana, estos esfuerzos parecerían insignificantes. Sin embargo, mirándolo a través de los ojos de la fe, esta jornada tiene un potencial de enorme significado para construir la cultura de la vida y la familia en Rusia y en toda Europa.

El pequeño grupo salió del puerto de Vladivostok en la Costa Rusa del Pacífico el 14 de junio del 2012, con una réplica del famoso Icono de Nuestra Señora de Czestochowa. La venerada imagen de nuestra Bendita Madre, puesta en un tráiler diseñado especialmente para el viaje, será reverenciada a través de ocho usos horarios en Rusia, y eventualmente viajará a través de Europa hasta Fátima en Portugal, esperando que para la primavera del 2013 llegue a Estados Unidos.

¿Qué motivó a un pequeño grupo de creyentes a emprender lo que es llamado “De Océano a Océano, Campaña Internacional en Defensa de la Vida”, a llegar a esas medidas extremas, en lo que para muchos es considerado una práctica religiosa pintoresca? El peregrinaje, o la peregrinación del icono, tiene la intención de responder al casi centenar de abortos legalizados en Rusia, y parar la propagación de esta plaga mortal en todo el mundo. Cualquiera que ha estudiado las escrituras o la historia de la Iglesia, puede reconocer el propósito de este extraordinario evento. Ellos creen que la victoria de la vida vendrá con la poderosa intercesión de María, Madre de Dios, como está escrito en el libro del Apocalipsis (Apocalipsis 11, 19-12, 18).

En el Antiguo Testamento, los judíos cargaban el Arca de la Alianza en las batallas (Josué 3, 3-6). Muchos Padres de la Iglesia comparan a María como el Arca de la Nueva Alianza, como San Ambrosio. San Ambrosio escribió: ”El Arca contenía las Tablas de la Ley; María contiene en su vientre al Heredero del testamento. El Arca llevaba la Ley; María contiene el Evangelio. El Arca hacía que la voz de Dios se escuche; María nos entregó la Palabra de Dios. El Arca brillaba con el oro más puro; María brilla tanto interna como externamente con el resplandor de su virginidad. El oro con el que se adornaba el Arca venía del interior de la tierra; el oro con el que María brilla sale de las minas del Cielo”. (Serm. xlii. 6, Int. Opp., S. Ambrosio)

Aunque la práctica de peregrinar con iconos de la Santísima Madre ha pasado de moda en gran parte del mundo Católico, cabe destacar su historia. Incluso en Occidente, los fieles durante siglos veneraban la imagen de la Santísima Virgen pidiendo su intercesión en momentos de gran angustia.

En 1571, cuando el Arzobispo de México escuchó que Europa estaba siendo amenazada por los turcos, envió una réplica de Nuestra Señora de Guadalupe al Papa Pio V. El Papa entregó la imagen al Almirante Andrea Doria, quien la llevó a batalla en una nave a Lepanto. El 7 de octubre de 1571, las fuerzas cristianas derrotaron la mayor fuerza naval turca y salvaron a Europa de la invasión.

En 1812, los rusos llevaron el icono de la Reina Madre de Dios a batalla cuando Napoleón y su ejército se dirigían a invadir Rusia. Un siglo después, el 1 de marzo de 1917 una piadosa viuda de nombre Eudocia recibe una revelación de la Santísima Virgen María para que busque el icono, que había desaparecido por muchos años. Al día siguiente, a la misma hora en que el Zar Nicolás abdicaba el trono, es decir, tres de la tarde del 2 de marzo, el icono fue hallado en el sótano de una casa en el poblado de Kolomenskoye, a las afueras de Moscú.

Muchas personas comenzaron a venerar el icono y los milagros de sanación comenzaron a ocurrir, aun cuando lo que se conoció como la Revolución de Octubre se lanzara en contra de los zares reinantes de Rusia. Eudocia, después de otra visión, dijo que la Madre de Dios le había comunicado que si el icono marchaba siete veces alrededor del Kremlin, éste no caería. Pero solo alcanzaron a realizar una vuelta antes de que los disparos se oyeran. Los bolcheviques capturaron el Kremlin, marcando el comienzo del siglo más oscuro para Rusia.

Estas y otras historias no son escuchadas con frecuencia en Occidente, porque los iconos son particularmente venerados en Oriente. Los iconos, al contrario de las pinturas, esculturas y otras representaciones artísticas de personas, son consideradas casi como una presencia viviente de la persona que es venerada.

El Icono de Nuestra Señora de Czestochowa tiene una historia fascinante. La tradición cuenta que san Lucas, el evangelista, “escribió” él mismo el icono de Nuestra Señora de Czestochowa en una tabla de ciprés en la casa de la Sagrada Familia. El Icono fue robada por ladrones husitas anti-católicos en 1430, que la acuchillaron y trataron de quemar, tanto así que hoy en día es conocida como la “Virgen Negra”. En un sentido, ella es el símbolo de Polonia, cicatrizado pero perseverante en la fe.

Nuestra Señora ha intercedido por el pueblo polaco muchas veces a lo largo de la historia. Sólo un ejemplo más actual. Del 1 al 7 de mayo de 1979 muchos polacos vivieron lo que fue conocido como “El cerco de Jericó”. En el Santuario de Nuestra Señora de Czestochowa ellos rezaron continuamente rosarios para que el Partido Comunista del gobierno relaje sus restricciones en la visita del Papa Juan Pablo II a su pueblo natal. El 7 de mayo, el gobierno polaco inesperadamente cedió y retiró los principales obstáculos que impedían la visita del Papa. Ahora sabemos el fuego que el Beato Juan Pablo II encendió con su valiente proclamación del evangelio “detrás de las líneas enemigas”, y del rol protagónico que desempeñó en la revolución pacífica más notable del siglo, con el tiempo, incluso la caída del comunismo en Polonia y, finalmente, de la Unión Soviética.

Este y otros eventos históricos similares, testifican del siempre olvidado poder de la oración, particularmente cuando pedimos la intercesión de la Virgen María quien ayuda a los fieles a salir airosos de los problemas que parecen abrumar a cualquier ser humano. Y esta es precisamente la situación en la que se haya Rusia hoy en día.

En 1920, Rusia fue el primer país en legalizar el aborto sin motivo alguno. José Stalin lo volvió ilegal en 1936, no por respeto a la vida humana, sino porque veía que estaba debilitando a su nación, diezmando la población de Rusia junto con la guerra, las diversas purgas y la hambruna de muchos. Poco después de su muerte, en 1954, el aborto fue nuevamente legalizado y el número considerado de bebes perdidos fue impactante, alcanzando 5,6 millones de abortos en 1964. El aborto es la principal forma del control de natalidad en Rusia, aunque los niveles están cediendo (todavía a un ritmo muy alto, algo menos del 40% de todos los embarazos terminaron en abortos en el 2010).

En 1917, Nuestra Señora de Fátima predijo que Rusia esparciría sus errores alrededor del mundo. Aunque mucho se puede escribir acerca del ancho y largo de sus errores, el más grande es sin duda la aprobación estatal de la matanza de los bebes en el vientre materno.

Pero ahora, otra vez Rusia sabe que tiene un problema. Su población continúa declinando a una velocidad alarmante. El porcentaje total de fertilidad en las mujeres rusas fue históricamente baja en 1999 con 1,16. Para 2010 subió un poco a 1,59. Incluso el Presidente Vladmir Putin, quien no se opone al aborto por asuntos morales, ha animado a las familias rusas a que tengan más hijos ofreciendo incentivos económicos. A pesar de eso, sus políticas han tenido poco efecto.

En este contexto de colapso demográfico, el aborto generalizado y una aparente incapacidad de Rusia y de otros países europeos a volver a estar abiertos a la vida, un pequeño grupo de fieles están buscando una solución más dramática y más tradicional. La encíclica Evangelium Vitae del Papa Juan Pablo II, a la que él llama “centro de todo mi Magisterio Pontificio” cierra con una oración a la Santísima Virgen María para vencer a la cultura de la muerte.

Así que los fieles se vuelcan a Nuestra Señora con el título de Nuestra Señora de Czestochowa, que es venerada tanto en el Occidente como en el Oriente. En enero del 2012, junto a un grupo de líderes pro-vida de 18 países, yo viajé al Santuario de Jasna Gora en Czestochowa, Polonia, para ser parte de la planificación de este proyecto. Nos reunimos con el Arzobispo de Cracovia en una misa especial el 28 de enero, y realizamos un acto de entrega a Nuestras Señora de Czestochowa para defender la vida, la familia y para orar por el éxito De Océano a Océano, Campaña Internacional en Defensa de la Vida.

Incluso antes de comenzar oficialmente la campaña, el icono fue llevado a cuatro ciudades de Kazajstán, donde los medios locales cubrieron el evento. Personas de todas las edades vinieron a adorar el sagrado icono. Los coordinadores de la peregrinación, Lech y Eva Kowalewski de Human Life International de Polonia, coincidieron en que las caras de los sacerdotes Ortodoxos y de los laicos brillaban de emoción.

El icono llegó a Vladivostok el 11 de junio y fue venerado en diferentes iglesias, incluida la Catedral de san Nicolás. Un buen número de fieles acompañó a la Santísima Virgen con oraciones y asistiendo a conferencias con temas pro-vida, que serán parte importante de la misión a lo largo de la peregrinación.

Frente al icono, el Arzobispo Aleksandr Talko, Jefe del Departamento de Beneficencia de la Iglesia y Servicios Sociales de la Jerarquía de Vladivostok, ofreció una oración. El padre Aleksandr dijo: “Durante los días que el icono de Czestochowa permanezca en Vladivostok, se elevarán oraciones ante el milagroso icono, solicitando a la Madre de Dios que fortalezca los lazos familiares”. Los líderes de la Iglesia también rezaron para reducir el problema de alcoholismo en Rusia. Cuando las personas carecen de fe y esperanza, muchas veces recurren al alcohol que perjudica su propia vida y frecuentemente lleva a la disolución de las familias.

Esto no es poca cosa. Los líderes Ortodoxos están trabajando en conjunto con los Católicos Romanos para coordinar la histórica peregrinación por Rusia. Debido a la delicada relación entre los Rusos Ortodoxos y la Iglesia Católica, el icono visitará -al menos en Rusia- solo las Iglesias Ortodoxas. Oramos para que nuestra devoción compartida a la Santísima Virgen María sea una ocasión para construir el respeto mutuo, y colaborar en otros esfuerzos para promover a futuro la fe, la vida y la familia.

Les pido que recemos para que la Santísima Virgen María use este evento extraordinario para inspirar a la gente de Rusia y de toda Europa a que regrese a la fe en Dios y a su devoción. Rezamos para que Dios bendiga los esfuerzos de este pequeño grupo de misioneros y que la Santísima Virgen María les abra los ojos a las personas en todos los lugares que Ella visite, para que estén abiertos a la vida, al matrimonio y a la vida en familia.